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Terapia en niños y adolescentes

El proceso de consolidación de la personalidad de un individuo, así como el logro de una adecuada adaptación al medio (salud mental), son el resultado de la correcta superación de las distintas etapas del desarrollo psico-biológico desde la más temprana infancia hasta la adolescencia tardía.

Por lo tanto, la función del terapeuta que se centra en niños y adolescentes no solo se limita a la atención y ayuda respecto a resolución del síntoma o malestar, sino también a la adecuada gestión de dichos estadios evolutivos. De esta forma, el terapeuta infanto-juvenil integra su actividad asistencial con una visión fundamentalmente preventiva.

¿Por qué es necesario trabajar en terapias con niños y adolescentes?

Porque el conocimiento del mundo emocional de los niños ayuda a prevenir muchas de las dificultades que se producen en el desarrollo integral de las personas.

El trabajo terapéutico con los niños y adolescentes ayuda a evitar problemas que pueden complicarse cuando implican a la familia y a los aspectos de aprendizaje comprometiendo patológicamente el desarrollo emocional.

Los síntomas de trastornos en la infancia y adolescencia son diferentes de los síntomas adultos. Por ejemplo, los niños tienden muy fácilmente a expresar dificultades afectivas o de adaptación con enfermedades que aunque tienen síntomas físicos son de origen psíquico.

Psicoterapia en niños y adolescentes

Los niños y adolescentes están en período de aprendizaje y conocimiento intelectual.

Esta también es un área que expresa trastornos psíquicos, pero no intelectuales, sino también psicológicos. Muchos bloqueos y dificultades en el aprendizaje tienen un origen en la vida psíquica de los niños y adolescentes y estos síntomas se deben resolver en un trabajo de psicoterapia.

Los problemas de relación con el entorno familiar y los de adaptación a las relaciones más allá de la familia también reflejan trastornos de origen emocional que pueden ser atendidos y resueltos en psicoterapia; por eso es importante saber sobre los trastornos normales y diferenciar de los que son conflictos en la niñez y la adolescencia.